Somos Josefina Guzmán y Francisca Klingenberg y les venimos a contar sobre nuestra experiencia como internas de terapia ocupacional en la residencia Beit Israel.
Ha sido una pasantía llena de aprendizajes tanto en lo personal como en lo profesional. La relación que se ha formado con el equipo y las personas mayores ha sido de gran apoyo para nuestro proceso, así como poder hacernos cargo de talleres y trabajar individualmente. Somos estudiantes de quinto año, ad portas de ser profesionales, y estamos poniendo en práctica lo aprendido en la Universidad por lo que la acogida y las ganas de participar de parte de los residentes es fundamental para poder hacerlo. Hacer el internado en un lugar en donde hay otras internas, enriquece nuestro proceso de aprendizaje, podemos compartir nuestra visión y a la vez complementarnos con sus miradas. Hacia los residentes vemos cómo les beneficia el compartir con gente joven, que trae nueva energía al lugar, motivándose a participar más de los talleres, y a su vez toman un rol de enseñanza desde la empatía para que podamos aprender de la mejor manera.
El trabajo del terapeuta ocupacional en la residencia es fundamental para mejorar la calidad de vida de las personas mayores.
Es un trabajo que se basa en la cotidianeidad, en la vida diaria de las personas, interviniendo y trabajando desde las áreas más básicas de su vida para poder aumentar su independencia. Para poder trabajar estos aspectos se realizan distintas evaluaciones individuales, evaluando desde su estado de ánimo, funciones cognitivas, hasta cómo se desempeñan en las actividades tales como vestirse, bañarse, comer, entre otras, de acuerdo a los resultados de estas se determina el plan de intervención. Es por esto que es relevante generar un clima de confianza y respeto, en donde se tomen en cuenta a ellos como sujetos de derechos para no pasar a llevar los principios básicos de su persona.
Sabemos la importancia que tiene para los residentes participar socialmente con sus pares, ya que esta es la mejor forma de mantenerse activos.
En esta misma línea es que se desarrollan y realizan distintas actividades y talleres acorde a sus intereses trabajando sus funciones cognitivas, motoras y de participación social. Dentro de estos podemos encontrar los talleres de arte, actualidad, baile, cuenta cuentos, yoga, psicología, estimulación global, recorriendo el mundo, entre otros.
El equipo de salud aquí presente es una parte elemental del trabajo que se hace con las personas mayores, observamos que sus roles y miradas se complementan, visualizando a las personas holísticamente, brindándoles así una atención de calidad. La presencialidad, les permite mantener una comunicación efectiva y estar al tanto de lo que sucede con cada uno de los residentes. De la misma forma, el personal de asistencia, tanto los asistentes de piso, tens, como el personal de servicio entregan día a día un trato amable y respetuoso, contribuyendo a mejorar el ambiente de la residencia.
Estamos muy felices de haber podido hacer nuestro internado en esta residencia y agradecemos el gran cariño y buena acogida que nos entregaron.
Esperamos que las demás residencias puedan estar al nivel para así propiciar una mejor calidad de vida de las personas mayores, respetándolos, tomándolos en cuenta como adultos y sujetos de derechos que son.