Una noche llena de color, magia y reencuentro, luego de tres años de Erev Reshet online. Más de 500 personas reunidas por una misma causa en común: la solidaridad. ¡Sin duda una Erev Reshet inolvidable!
“Misión Posible” fue el lema para recaudar 100 millones de pesos, desafío que fue superado gracias al apoyo de todos los donantes, asistentes y auspiciadores. Por primera vez Vivi Kreutzberger animó el evento, y con su carisma, enorme experiencia y compromiso con Reshet, logró llevar a todos desde la risa a las lágrimas al ver los videos de casos testimoniales.
“Retornar la presencialidad fue un desafío que se nos había olvidado. Antes de cada Érev Reshet me da mucha ansiedad y nervios, pero cuando estamos en el EIM y vemos el salón lleno, caras emocionadas con cada testimonio y el respaldo de toda la Comunidad, siento mucho orgullo de representar y pertenecer a Reshet. Es una sensación de misión cumplida, de que pudimos cambiar entre todos realidades, tocamos vidas y podemos devolver la dignidad a quienes necesitan de nuestro apoyo. Eso me motiva y a pesar de que siempre digo “esta es mi última Erev”, al día siguiente, estoy pensando en la próxima”, expresa Gabriela Feldman, Directora Ejecutiva de Reshet.
“Lo pasé muy bien y creo que la gente estaba muy entusiasmada. Lo más importante es que se logró la meta y pudimos transmitir el voluntariado, quiénes trabajan, los que logran hacer uso de Reshet y todas las redes. ¡Felicitaciones a todos!, nos cuenta Vivi Kreutzberger
La gala estuvo marcada por risas, reconocimientos y lágrimas de emoción.
El juego y la diversión también estuvieron presentes: todos participaron de un bingo explosivo y una trivia por mesas. Con mucha alegría y un profundo agradecimiento, se reconoció a tres personas que ayudaron de manera incondicional durante el año pasado a Reshet: – Doctor Psiquiatra Benjamín Icekson y Doctor Psiquiatra Manuel Sabah. A su vez se premió a la voluntaria del año, Ely Zimermann, por su trabajo y colaboración durante el año 2021-2022 y por el cuidado especial de Alvin y Sarita Gotlieb (Z.L)
“Me siento muy honrado de recibir este reconocimiento en Erev Reshet, que es fruto de un trabajo permanente de estar al servicio de la gente más necesitada. Yo soy un eslabón más de una cadena larga de personas que están permanentemente preocupadas de las personas en esta red, y donde cada uno de los colaboradores contribuye desde sus conocimientos y profesiones. Este reconocimiento no es para mí, sino para toda la gente que trabaja día a día en Reshet, no en busca del lucro ni los pergaminos. Todos lo hacen por la mitzvá de colaborar con sus hermanos”, nos expresa el médico psiquiatra, Benjamín Icekson.
“Me siento muy honrado y la verdad que simbólicamente lo comparto con todo el voluntariado de Reshet que día a día durante todo el año está aportando de diversas forma. El premio es un impulso y un desafío para seguir trabajando y entusiasmando a otros miembros de la comunidad a cooperar( javer Reshet, regalos –donación, aporte monetario, etc).
Reshet nos da la oportunidad a los miembros de nuestra comunidad de trabajar bajo el concepto de tikún Olám”, nos señala el médico psiquiatra Manuel Sabah.
Reshet hoy cuenta con 380 Javerim que donan mes a mes y la meta para este 2023 es lograr 550 voluntarios. Las necesidades económicas para la operación anual de Reshet son 420 millones, esta gran Erev representa tan solo el 27% del total de sus gastos.
¡Los invitamos a sumarse como Javer Reshet y así ayudar a tantas personas de nuestra Comunidad!
Agrega Icekson que “estamos viviendo un momento en nuestra sociedad donde se fomenta excesivamente el individualismo, y donde todo se centra en la competencia por el éxito (lograr buena situación económica y buenos lugares en nuestra sociedad). En esas circunstancias se nos olvida que nada se puede lograr solo en la vida, aprendemos con la ayuda de otros (padres, profesores, amigos etc), y que, si bien podemos lograr buenos niveles de autonomía e independencia, nunca lo hacemos solos, siempre hay gente al lado que nos colabora en algo.
Reshet es justamente eso: colaborar con quienes a veces se benefician con nuestra ayuda y nuestra mano amiga.
Por eso, invito a todos los que se interesen por construir una comunidad que realmente valga la pena, que se animen a colaborar porque realmente hace mucha falta. Sin lo colaborativo, nos transformamos en seres individuales, cada uno con su rumbo, pero con menos sentido de pertenencia, y, es la pertenencia la que nos da a fin de cuentas el sentido de la vida y la identidad”, asegura Icekson.
“Siento un gran orgullo de pertenecer a Reshet, por la gran labor que realizan día a día; la preocupación, amor y delicadeza con la que atienden a las personas, el compromiso que adquieren con cada uno de ellas es digno de admiración. A los que, aún, no son voluntarios les pido que se acerquen a esta institución y acompañen a quienes realizan esta labor para que vivan lo que es realmente ser un voluntario. Estoy segura que con un día se van a entusiasmar y solo van a querer ser uno de ellos. Es una experiencia de vida inolvidable”, nos cuenta Ely Zimermann.
“Nadie sobra en esta tremenda obra social de ayuda que realiza Reshet a miembros de nuestra comunidad, quienes necesitan de la ayuda el día de hoy y no mañana, en especial en los tiempos que estamos viviendo. En Reshet hay muchas formas de cooperar donde indudablemente que un aporte sostenido en el tiempo, permite continuar de manera segura y responsable con esta gran obra. Los invito a sumarse y ayudar a este proyecto social comunitario”, señala Sabah.
“Solo puedo agradecer, dar las GRACIAS a todos!”
A nuestro equipo de Érev, a Daniel Becker que hace posible todas nuestras ideas, a Nicole Moses, Viví Levancini, Gaby Dascal y Maru Btesh, a las empresas que año a año nos apoyan y confían en nosotros, a los animadores, a los voluntarios que trabajan de manera incansable, a cada uno de los javerim que aportan mensualmente a nuestro equipo de comunicaciones y al equipo de operación, a cada uno de los asistentes que hicieron de la Érev 2022 una MISIÓN POSIBLE”, comenta Feldman.