Nadia Murad habló en la Knesset. De izq. A der.: Ksenia Svetlova, de la Unión Sionista MK, y la sobreviviente Yazidí del estado islámico, Nadia Murad.
La activista yazidí, Nadia Murad, quien recibió este año el Premio Nobel de la Paz, visitó Israel el año pasado. Murad expresó en esa ocasión que su viaje a Israel le mostró “que frente a la opresión y el genocidio, una comunidad puede salir fortalecida”.
La visita de Nadia Murad a Israel fue posible gracias a la iniciativa de la organización de ayuda humanitaria IsraAID, institución que coordinó conferencias de la activista yazidí en la Knésset, el parlamento israelí, y para el público general. IsraAID ha trabajado desde el año 2014 en la ayuda de yazidíes en todo el mundo afectado por el ISIS, brindando asistencia humanitaria y apoyo psicológico a las víctimas.
Nadia Murad visitó Yad Vashem.
Murad dijo que “los judíos y los yazidíes compartimos una historia común de genocidio que ha moldeado la identidad de nuestros pueblos, pero transformamos nuestro dolor en acción”. Agregó que “por tres años el ISIS ha robado la autoría de la historia de los yazidíes pero no dejaremos que escriban nuestro futuro”. Nadia Murad agradeció “por dar un ejemplo a los yazidíes de cómo podemos permanecer conectados con nuestra historia y patrimonio, mientras modelamos nuestro propio futuro”.
Los co-CEOs de IsraAID, Navonel Glick y Yotam Politzer, dijeron que el premio recibido por Nadia Murad es “un importante reconocimiento de su trabajo”. Además reforzaron el compromiso de IsraAID de continuar colaborando con el pueblo yazidí.