Por Daphne Dionizis
El calor llegó para quedarse y con ello se asoman los diversos panoramas veraniegos para disfrutar en familia. Sin duda es la temporada más esperada por los niños, sin embargo, trae consigo diversos peligros que debemos prevenir.
Conversamos con destacados doctores quienes nos orientarán sobre las principales enfermedades y riesgos que pueden surgir en esta época.
Cuidándonos la piel
Muchas veces no somos conscientes de la gran exposición que sufre nuestra piel al sol y de los virus que existen en mayor medida en verano. A veces solo recordamos que debemos proteger nuestra piel al ver la gran cantidad de publicidad de bloqueadores solares o cuando ya logramos el bronceado fascinante que deseábamos.
Sin embargo, al descuidarnos podemos convertir nuestras vacaciones en temidas lesiones.
La dra. Vicky Roizen, Dermatóloga de Globalderm, nos explica más sobre las quemaduras solares y los moluscos contagiosos.
¿Qué son las quemaduras solares? ¿Qué tipos existen?
– Se define como quemadura, las lesiones que ocurren en la piel por un agente externo, físico, químico o térmico. Una de ellas es la quemadura solar, que se produce por la radiación ultravioleta que llega del Sol a la Tierra.
Las quemaduras, en general, se clasifican según su gravedad en: a) superficiales o de primer grado (afectan únicamente a la epidermis o capa externa de la piel), b) parciales o de segundo grado (afectan epidermis y dermis) y c) de espesor total o tercer grado en que afectan todas las capas de la piel, incluyendo el tejido subcutáneo. Asimismo, las quemaduras se pueden clasificar según su extensión en menores, moderadas y graves.
Las quemaduras solares suelen ser superficiales o de primer grado y se manifiestan con hinchazón, calor, dolor, enrojecimiento y a continuación con descamación.
¿Cómo podemos evitar quemaduras de sol?
– Lo más importante para prevenir quemaduras solares es usar ropa adecuada, de manga larga, trama gruesa y estrecha, sombrero de ala ancha y anteojos con filtro UV. Evitar la exposición entre las 10:00-16:00 hrs., buscar sombra si necesita estar al aire libre, uso de protector solar siempre y aplicado media hora antes de salir con reaplicación cada tres horas.
Muchos recomiendan los típicos remedios de su abuela, como leche o harina para calmar el dolor ¿Qué nos recomiendas para curarla?
– Cuando las medidas de prevención fallan y ocurre la quemadura solar, se debe tratar según su magnitud. Si es leve, con cremas hidratantes que alivian la sensación de molestia en la piel, beber mucha agua y se pueden tomar analgésicos para el dolor. Si es un poco mayor, puede requerir uso de corticoides tópicos u orales para desinflamar, siempre bajo prescripción médica. No olvidar que estas lesiones se pueden infectar y requerir antibióticos.
¿Pueden dejar una cicatriz? En caso que sí, ¿qué podemos hacer para evitarlas?
– Las quemaduras solares no suelen dejar cicatrices salvo que se compliquen con infecciones o que sean muy profundas. En estos casos se debe consultar a un especialista para su buen manejo.
¿En qué casos debemos dirigirnos a urgencia?
– Si junto con el enrojecimiento de la piel, la persona presenta mareos, náuseas, vómitos, deshidratación o desmayos, debe consultar al Servicio de Urgencias.
Moluscos contagiosos
El molusco contagioso es una infección viral de la piel, producida por un miembro de la familia Poxvirus que se presenta como protuberancias redondas, firmes e indoloras, con centro umbilicado y de color rosado o perlado. En general son pequeñas entre 1 a 15 mm y pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, nos explica la dra. Roizen.
¿Por qué aumentan los casos en verano?
– Los moluscos contagiosos se transmiten por contacto de persona a persona y por objetos, por lo que el tener más piel expuesta y/o compartir toallas, ropa y juguetes de agua, podría explicar su aumento en verano, aunque se pueden presentar todo el año.
¿Se puede transmitir al interior de una piscina?
– No se ha demostrado su transmisión al interior de una piscina, sin embargo, en esos contextos se presenta mayor interacción de piel con piel o con superficies donde puede estar el virus.
¿De qué manera se pueden prevenir?
– La prevención consiste en lavarse las manos con frecuencia, evitar compartir ropa, toallas, y otros elementos personales y mantener la piel lo más sana posible, bien hidratada, sin heridas, fisuras ni lesiones para que la función de barrera esté indemne y pueda proteger de la infección.
El virus puede permanecer varios meses en el organismo ¿Cuál es el tratamiento más adecuado?
– Hay varias formas de tratarlos, se pueden extirpar con pinzas o curetas bajo anestesia local, se pueden congelar por crioterapia o utilizar medicamentos tópicos que producen ampollas como la Cantaridina.
Se debe analizar cada caso para realizar el mejor tratamiento según número, localización y edad.
Rescate al interior del agua
Sin duda alguna, este es uno de los grandes miedos que vivimos muchas personas al disfrutar de un día de piscina, río o mar: los tan temidos ahogos. El dr. Simón Kaufman, Director Médico de Hatzalah, nos explica cómo reaccionar si un niño sufre un ahogo y de qué manera podemos disfrutar del agua sin estos inconvenientes.
¿De qué manera se debe actuar en caso de ver a un niño ahogado?
– Si uno se enfrenta a la situación de tener a un niño flotando en la piscina, lo primero es sacarlo lo más pronto posible. Es igualmente importante pedir ayuda. Si estás solo, luego de sacarlo del agua debes pedir auxilio. Si estás acompañado, la segunda persona debe llamar rápidamente al servicio de rescate que llegue más rápido al lugar donde se encuentran, ya sea Hatzalah, SAMU o rescate privado. El tercer punto es iniciar maniobras de reanimación cardiopulmonar, si estás capacitado.
Por esto, es tan importante tomar cursos de primeros auxilios, ya que puede hacer una diferencia tremenda en la vida de un niño.
¿Cuánto tiempo hay entre que el niño se comienza a ahogar y puede llegar a ser un riesgo fatal?
– Lo primero es entender que el riesgo de asfixia por inmersión no es solo cuando un niño se cae al agua, también puede ocurrir cuando un niño que está nadando y se cansa. Es importante estar atento cuando nadan, porque al cansarse no van a gritar ni patalear, sino que lentamente comenzarán a hundirse.
Desde que el niño pierde su capacidad de mantenerse a flote, lo que es variable según edad y entrenamiento, solo tiene un par de minutos antes de que su cerebro empiece a sufrir daño potencialmente irreversible.
¿Cómo se puede disfrutar de la piscina o mar de manera responsable?
– Probablemente lo que más tranquilidad nos da, es tener una reja con seguro en la piscina, aunque sea poco estético. También es importante estar consciente de cuánto puede nadar cada niño sin flotadores y ponérselos cuando lo requieran.
Siempre que los niños se bañen en piscina o mar deben estar supervisados.
Como dije antes, el niño que se ahoga no hace ruido y si uno no está al tanto puede no darse cuenta. Muchos de los accidentes ocurren sin que nadie se de cuenta.
¿Es aconsejable el uso de flotadores en niños que no saben nadar?
– Los flotadores son un elemento de seguridad y permiten que se puedan bañar de manera autónoma, pero debe usarse apropiadamente. Lo más importante es entender que no reemplazan la supervisión adulta, pueden dejar de funcionar adecuadamente o ser retirados por el mismo u otro niño.
Deben ser de buena calidad y ser revisados para que no estén rotos o pinchados, y siempre hay que fijarse de que sean apropiados para el peso y edad del niño.
La mayoría de los ahogos en piscinas es por el descuido de los adultos ¿Qué mensaje le darías a los padres y/o adultos responsables?
– Nadar es muy entretenido, disfrútenlo junto a sus hijos. Jugar con ellos y cuidarlos al mismo tiempo es un tremendo plan para el verano.
Recuerden que estamos en pandemia, cuídense y solo usen piscinas que estén autorizadas y con las medidas que dictamina el Ministerio de Salud.
¡Evitemos el dolor!
Las altas temperaturas traen consigo el hecho de que pasemos más tiempo al aire libre, descalzos para aprovechar el pasto y jugando con agua también. ¡Sin duda disfrutar de la naturaleza es un pasatiempo de verano genial! La dra. Helly Einisman, pediatra broncopulmonar del Hospital Josefina Martínez y de
Pediatría el Alba, nos recomienda cómo disfrutar del aire libre y evitar la aparición de una otitis o una picadura de abeja/avispa.
La otitis “de piscina”, o conocida médicamente como otitis aguda externa infecciosa, corresponde a la infección del canal auditivo externo. El bañarse en piscinas, u otras fuentes de agua, es un factor de riesgo para que ocurra, ya que la piel del conducto se humedece y queda propensa a la infección. La dra. Einisman agrega también que existen otros factores de riesgo a considerar, como el trauma y la introducción de objetos en el oído, como cotonitos, tapones y audífonos, limpieza excesiva (el cerumen es un mecanismo de defensa, o además se puede provocar trauma e irritación), entre otros.
¿Cómo puedo darme cuenta de que mi hijo sufre de otitis si aún no habla?
– Las otitis leves producen dolor leve o molestia y/o prurito. Esto puede hacer que el niño se vea molesto y tocándose la oreja, a medida que aumenta la severidad, el dolor es más intenso por lo que se puede agregar irritabilidad creciente. Los niños con dolor de oído deben ser evaluados por un médico para visualizar el interior y hacer el diagnóstico, diferenciando de otitis media, cuya manifestación es similar, aunque ésta es más frecuente que presente fiebre y esté asociado a un cuadro respiratorio.
Ocasionalmente se evidencia la infección por salida de secreción desde el conducto auditivo lo que puede ser visto por los padres. En estos casos, igual se requiere evaluación médica, también para diferenciar el tipo de otitis (que tienen diferentes tratamientos) y para ver el grado de compromiso en caso de ser externa, lo que influye en el tipo de tratamiento a usar.
¿Cómo se puede controlar el gran dolor que causan?
– Lo más recomendable es el uso de un antiinflamatorio, por ejemplo, ibuprofeno.
Una vez evaluado por un médico, se indicará el tratamiento que puede incluir el uso de corticoide local, lo que también ayudará a controlar la inflamación y el dolor.
¿Recomiendas utilizar tapones o gotas de glicerina para evitar que entre agua al oído?
– Los tapones especialmente diseñados para nadar sí pueden ayudar a reducir el riesgo al evitar la entrada de agua, ya que la humedad es lo que predispone a la infección. Las gotas con ácido acético y glicerina se usan, pero no hay estudios que demuestren su utilidad en prevenir las otitis externas.
¿Qué aconsejas para prevenirlo?
– Lo ideal es hacer lo posible para secar los oídos al salir del agua, para esto agitar la cabeza y secar con secador suave a distancia de unos 30 cm. Además, no introducir nada en el canal para evitar trauma e irritación.
¿Hay alguna diferencia entre el agua de mar o de piscina?
– No, ya que el factor principal es la humedad más que las características y contenido del agua.
Picaduras de avispa
¿Cómo se pueden distinguir los tipos de picaduras?
– Ambas dejan veneno y esto produce una reacción muy dolorosa, a veces con algo de picazón, y se enrojece el área afectada. Sin embargo, las abejas dejan la lanceta al picar y en general mueren, las avispas no la dejan.
Existen algunas que son leves y otras que requieren de atención médica inmediata ¿Cuáles son las reacciones para poder diferenciarlas?
– Una reacción leve que no requiere atención médica, generalmente afecta solo el área de la picadura con enrojecimiento de máximo 10 cm. Si el área es mayor o hay reacción cutánea lejos de la picadura, eso es un signo de alarma y habría que acudir a un servicio de urgencia. Otros signos de alarma son síntomas de otros sistemas, como dificultad respiratoria, vómitos u otros síntomas gastrointestinales o mareos, por los cuales también hay que consultar inmediatamente.
¿Cuál es el tratamiento en el caso de una leve?
– En ambos casos hay que lavar con agua y jabón. Aplicar hielo inmediatamente ayuda a reducir la inflamación como efecto del veneno, y si persiste mucho el dolor, tomar un antiinflamatorio puede ayudar.
En el caso de una picadura de abeja hay que sacar la lanceta intentando no apretar el saco que contiene el veneno, así que es ideal hacerlo con algún objeto más romo o los dedos, y no con una pinza.
En verano aumentan los casos de pacientes pediátricos que llegan a urgencias por un shock anafiláctico ¿Cómo se debe reaccionar frente a un caso de un niño alérgico a estas picaduras?
Si no ha presentado antes y se sospecha una reacción alérgica grave, hay que acudir inmediatamente a la urgencia.
– Si está el antecedente y se sabe que ha presentado reacción grave o anafiláctica previa, hay que acudir a un especialista en alergias para evaluar la necesidad de tener inyección de adrenalina siempre a mano y ver si está indicada otra terapia, como la inmunoterapia específica.